Los estereotipos de género: una manera de someternos a todos y todas.
Hace poco di una ponencia sobre Coeducación en el CEP de Almería afirmando lo siguiente:
El FEMINISMO es un movimiento de lucha por la IGUALDAD, ya que aquel es el punto intermedio entre el machismo y el hembrismo y por tanto busca alcanzar la igualdad real sea cual sea tu género.
- No va a existir igualdad hasta padres y madres no tengan los mismos derechos como tal, y para ello necesitamos que nuestros niños y los hombres se sientan tan necesarios para sus hijos e hijas como sus madres. Es más, la baja por maternidad/paternidad es un derecho del menor y no del adulto.
- No va a existir igualdad hasta que no dejemos de estereotipar a las nuevas personitas desde que nacen con colores, pendientes, cortes de pelo, prendas de ropa, juguetes, actitudes...
- Y no va a existir igualdad hasta que visibilicemos la diversidad sexual y defendamos el derecho a ser la persona que queramos ser.
No nos damos cuenta, pero los mismos que hacen las leyes de Igualdad nos inculcan valores binarios de bueno-malo, poder-sumusión, hombre-mujer, heteronormalidad-homodistorsión.
La primera medida que tomo es la de adoptar actitudes de igualdad en mi día a día a la vez que impregno mi discurso de conciencia feminista (recuerdo que el feminismo es sinónimo de búsqueda de la igualdad). De esta manera, el clima de mi hogar es de libertad y equidad, recordando que todas las personas que allí vivimos somos diferentes y somos iguales.
Estas mismas medidas son las que desarrollo en mi aula, aportando además actividades que desarrollan el Plan de Igualdad de mi centro del que soy coordinadora. Estas actividades giran alrededor de las máximas de visibilización, transversalidad, inclusión y paridad.
Por último, os comparto el lid up que realicé con mi alumnado el curso pasado por el 25N
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